8 DE MARZO. FREIRE, ESPIDO Y OTRAS
Resumen:
El 8 de marzo visto a través de la mirada de ocho mujeres escritoras, nacidas todas ellas en el País Vasco. Esta es la premisa del libro publicado por la BBK dentro de su colección Temas Vizcaínos para conmemorar el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Para ello la fundación Bilbao Bizkaia Kutxa ha convocado a Espido Freire, Luisa Etxenike, Karmele Jaio, Mariasun Landa, Toti Martínez de Lezea, Nerea Riesco, María Eugenia Salaverri y Arantxa Urretabizkaia con el objetivo de “aunar cultura y feminismo y dibujar retazos de vida a través de uno de los mejores miradores: la ficción literaria”.
La acogida del libro ha sido una sorpresa para los editores. En pocos días se ha agotado la primera edición de 8.000 ejemplares y ya se está imprimiendo una segunda de 1.000 unidades.
El resultado de este zortziko literario es un canto a la libertad de las mujeres. Una libertad arrancada no pocas veces a mordiscos a través de la maraña de las dificultades de la vida de cada día. (Reseña de Elkar Librerías)
Tres de sus autoras presentaron en Donostia -ante numeroso público femenino- sus pequeños relatos. La donostiarra Luisa Etxenike se mostró clara y revindicó que «el avance de la mujer en la sociedad debería convertir a esta jornada en una evocación de la memoria y no debería ser una reflexión moral de la situación que todavía hoy viven muchas mujeres», sentenció.
La errenteriarra Mariasun Landa quiso expresar su admiración por las mujeres luchadoras que consiguieron cambiar el rumbo de lo que parecía inexorable. “¿Cómo hay mujeres que son capaces de decir que no deben nada a nadie? Nosotras somos fruto de la lucha de muchas valientes mujeres, trágicas luchas, por conseguir sus objetivos. Hay que dar las gracias a esas generaciones que nos precedieron», sentenció.
Arantxa Urretabizkaia, con su relato Contra la abnegación, se adentró en un aspecto que le resultaba desconocido hasta la fecha. «He vuelto mi mirada hacia una zona a la que nunca antes había mirado. La relación entre una madre y una hija, y la prohibición de libertad que una ejerce sobre la otra, marcarán sus vida para siempre», explicó.
“Alas”, por Espido Freire
"8 de marzo de 1983
Se pensaba en un principio que Inés tomaría la Primera Comunión con el resto de niñas de su clase, en el mes de mayo, pero ya no había que hacerse esa idea. Adela debía casarse, como muy tarde, para marzo, y como consecuencia natural se decidió que la pequeña llevaría las arras, y, para salir del paso, invitaría a alguna de sus amiguitas. El resto de los compromisos (la familia, los amigos de los padres, algún cliente de la tienda que se había destacado por su fidelidad durante años) no encontrarían demasiada diferencia entre una celebración y otra".
